✅ La última nevada histórica en Buenos Aires fue el 9 de julio de 2007, causada por una ola polar extrema e inusual para la región.
La última vez que nevó en Buenos Aires fue en el 9 de julio de 1918. Este evento es recordado porque la nieve en la capital argentina es un fenómeno extremadamente raro debido a su ubicación geográfica y clima templado, que no suele permitir que las temperaturas bajen lo suficiente como para que se produzca nieve.
Vamos a explorar las razones por las cuales la nevada de 1918 fue tan excepcional, detallando las condiciones climáticas que permitieron que nieve en Buenos Aires y por qué es tan difícil que este fenómeno se repita. Además, analizaremos los factores meteorológicos que influyen en las precipitaciones en forma de nieve y cómo el cambio climático podría afectar la ocurrencia de nevadas en el futuro.
Contexto histórico de la nevada en Buenos Aires en 1918
El 9 de julio de 1918, Buenos Aires vivió una de las pocas nevascas que se tienen registradas oficialmente en la ciudad. La temperatura descendió abruptamente y se produjeron precipitaciones en forma de nieve y aguanieve que sorprendieron a los porteños. Según registros históricos, la temperatura máxima ese día fue de apenas 2 °C.
¿Por qué fue posible que nieve en Buenos Aires ese día?
Buenos Aires está situada en una zona con un clima templado pampeano, caracterizado por inviernos fríos pero no extremadamente severos. Para que nieva, la temperatura debe estar en o por debajo de 0 °C en la atmósfera baja y debe haber suficiente humedad.
- Ingreso de una masa de aire polar: En esa oportunidad, una masa de aire polar muy fría ingresó desde el sur, descendiendo las temperaturas a niveles nunca usuales para la ciudad.
- Alta humedad atmosférica: La presencia de humedad suficiente permitió que la precipitación se diera en forma de nieve y no solo como lluvia.
- Condiciones atmosféricas estables: La combinación de frío intenso y humedad generó un ambiente favorable para que la nieve pudiera llegar hasta el suelo sin derretirse.
¿Por qué no ha vuelto a nevar desde entonces?
Desde 1918, si bien se han registrado temperaturas bajas, la combinación de frío y humedad necesaria para que se produzca nieve en Buenos Aires no se ha repetido. Las causas principales son:
- Clima templado: Las temperaturas invernales en Buenos Aires suelen ser superiores a 0 °C, lo que impide que la nieve se forme o llegue al suelo sin derretirse.
- Ubicación geográfica: La ciudad está situada en una región donde predominan los vientos del norte y este, que transportan aire más cálido y húmedo del océano Atlántico.
- Efecto del cambio climático: En las últimas décadas se ha observado un aumento general de las temperaturas medias, lo que reduce la probabilidad de nevadas.
Implicancias y curiosidades
La nevada de 1918 es un evento histórico que hacia el presente se considera una rareza climática. Desde entonces, se han producido algunas precipitaciones invernales inusuales como aguanieve o granizo, pero nieve sólida y que cubra el suelo nunca más se volvió a observar en Buenos Aires.
Para las personas interesadas en la meteorología y el clima de Argentina, este caso sirve para entender la importancia de las condiciones atmosféricas específicas y la influencia del cambio climático en fenómenos meteorológicos poco frecuentes.
Factores climáticos que hicieron posible la nevada histórica del 2007
La nevada del 9 de julio de 2007 en Buenos Aires fue un fenómeno extremadamente raro y sorprendente, dado que la ciudad rara vez experimenta precipitaciones de nieve debido a su ubicación geográfica y clima templado. Para entender por qué esta nevada fue posible, es fundamental analizar los factores climáticos que se conjugaron ese día.
1. Descenso abrupto de la temperatura
Un frente frío polar avanzó rápidamente desde la Patagonia hacia el centro del país, provocando un descenso histórico de la temperatura en la capital. Mientras que la temperatura promedio en invierno ronda los 10 a 15 °C, el 9 de julio de 2007 el termómetro llegó a marcar valores cercanos a los 0 °C, incluso con ráfagas de viento que aumentaban la sensación térmica.
2. Alta humedad atmosférica
Otro factor clave fue la presencia de alta humedad en la atmósfera, producto de un sistema de baja presión que generó abundante nubiolencia y precipitaciones. La combinación de humedad y frío permitió que el agua precipitada llegara al suelo en forma de nieve, en vez de lluvia o aguanieve.
3. Condiciones geográficas y estacionales
Buenos Aires, ubicada en una zona templada, generalmente presenta inviernos con temperaturas moderadas y escasas heladas. La altitud baja y la cercanía al Río de la Plata dificultan la ocurrencia de nieve. Sin embargo, durante el invierno austral, los sistemas polares pueden penetrar más al norte, sumado a una configuración atmosférica particular que favoreció la tormenta de 2007.
Comparativa de temperaturas y precipitaciones en julio 2007
| Día | Temperatura máxima (°C) | Temperatura mínima (°C) | Tipo de precipitación |
|---|---|---|---|
| 8 de julio | 12 | 5 | Lluvia |
| 9 de julio | 2 | -1 | Nieve |
| 10 de julio | 6 | 1 | Lluvia |
4. Ejemplos y casos de uso: la nevada como fenómeno raro en zonas templadas
- Buenos Aires: desde el registro oficial de precipitaciones, la nieve es un evento que ocurre, al menos, una vez cada 50 años, y generalmente es muy leve.
- Otras ciudades templadas: ciudades como Madrid o Roma también experimentan nevadas poco frecuentes, ligadas a invasiones frías polares similares.
- Impacto urbano: la nevada provocó interrupciones en el tránsito y múltiples anécdotas, ya que la ciudad no cuenta con infraestructura habitual para la nieve.
Consejos prácticos para prepararse ante eventos climáticos extremos poco comunes
- Monitorear alertas meteorológicas y mantenerse informado a través de medios oficiales.
- Preparar la infraestructura especialmente en ciudades no acostumbradas a nieve, para evitar accidentes.
- Concientizar a la población sobre la posibilidad de eventos climáticos inusuales y cómo actuar ante ellos.
En definitiva, la nevada del 2007 en Buenos Aires fue el resultado de una combinación excepcional de factores climáticos, que rompieron con la habitualidad y dejaron una marca imborrable en la memoria de los porteños.
Preguntas frecuentes
¿Cuándo fue la última vez que nevó en Buenos Aires?
La última vez que se registró nieve en Buenos Aires fue en 1918.
¿Por qué es tan raro que nieve en Buenos Aires?
Por su ubicación geográfica y clima templado, las temperaturas suelen ser demasiado altas para que la nieve se forme.
¿Podría nevar en Buenos Aires en el futuro?
Es muy poco probable, pero no imposible, ya que las condiciones climáticas actuales son desfavorables para la nieve.
¿Qué factores climáticos influyen en la posibilidad de nieve?
La temperatura, la humedad, y la llegada de frentes fríos son factores clave para que nieve.
¿Hubo otras veces en la historia en que nevó en Buenos Aires?
Sí, registros históricos indican nevadas en años como 1912 y 1918, siendo la última la más notoria.
¿Cómo afecta el cambio climático a la nieve en Buenos Aires?
El aumento de temperaturas reduce la probabilidad de nevadas, haciendo estos eventos más raros.
| Año | Evento de nieve | Condiciones climáticas | Impacto |
|---|---|---|---|
| 1912 | Nevada leve | Frente frío intenso con temperaturas bajo cero | Causó sorpresa y curiosidad entre los porteños |
| 1918 | Nevada histórica | Ola polar con temperaturas extremadamente bajas para la región | Evento único en siglos, registrado en diarios y fotos |
¿Te interesó este tema? Dejanos tus comentarios y no olvides revisar otros artículos de nuestra web que seguro te van a interesar.






